De vuelta a nuestro hotelazo de la selva me doy cuenta de que hacerse mayor es preferir una piscina con cascadas y una camarero que te traiga mojitos a la aventura.
Hemos pasado el día relajadas, poniéndonos morenas y estirando la felicidad en el tiempo para ver si era capaz de llegar hasta el pasado.
Al anochecer hemos salido a comer a un restaurante con televisión y hemos visto como Perú perdía ante Venezuela.
No sé si me sabe mal o qué...
Por la noche, otro bañito a la luz de la luna, aaaaaaaaaaaaaay qué rico es el lujo!
Al llegar al hotel y abrir el armario encontramos gruesas mantas de alpaca, en plena selva! Me dio un ataque de risa al verlas, pero al acostarnos, extrañamente, el calor empezó a remitir e incluso refrescó...
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04:00, tormenta tropical, la temperatura se ha desplonado 15 grados y Gemma y yo nos avalanzamos tiritando al armario a por las mantas de alpaca.
Esta gente no es tonta!!!!
Disfrutad chicas! Os lo mereceis ;)
ResponderEliminarlujo! me encanta! ten cuidado no te asustes cuando vuelvas al barrio! tot i no tenir luxes, tenim un cor molt gran, això sí... :)
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