jueves, 4 de octubre de 2007

Educación


Sebas Parra es educador social, ha dedicado su vida a la enseñanza para adultos: alfabetización de inmigrantes africanos, educación social en Nicaragua y actualmente es profesor de Estudios de Educación Social en la Universidad de Girona. El pasado abril publicó el libro “L’Escola d’adults de Salt: una mirada apasionada”.

Esta semana he conocido personalmente a Sebas Parra. Ayer y hoy, durante horas he podido escucharle primero y conversar con él después sobre temas de cooperación en el ámbito educativo y especialmente en Nicaragua, país del que regresamos casualmente el mismo día.
La charla fue muy interesante y Sebas Parra me invitó a la conferencia que dará en noviembre Orlando Pineda, educador nicaragüense con quien él ha trabajado durante años, para poder seguir tratando el tema y aprendiendo de ellos.

Al final de la charla se establecieron las conclusiones de por qué la alfabetización tiene que ser prioritaria en cooperación:
- La alfabetización es el motor del desarrollo humano, base del desarrollo económico sostenible.
- Es imprescindible para construir una sociedad democrática. Con analfabetas no es posible la democracia.
- Es un derecho humano
- Es un deber ético en la lucha por la justicia, la igualdad y la solidaridad. Alfabetizar es dar la capacidad de poder leer el mundo.

¿Y por qué alfabetización en Nicaragua?
- Por razones históricas: Sandino, Carlos Fonseca Amador, FSLN, CNA, Río San Juan, AEPCFA…
- Por razones políticas: la alfabetización es revolución
- Por razones pedagógicas: la alfabetización es un modelo integrador de la producción, la salud y el medioambiente.

Como Sebas Parra decía en el poema a Paulo Freire que colgué aquí hace unos meses: Educación es Revolución.
Pero no una educación vertical, sino popular, en la que se nos eduque y no instruya.
En nuestra actual educación capitalista se afianzan las bases de la aceptación del estado de las relaciones humanas tal como las vivimos aquí, y las desigualdades, esto es: el profesor manda y el alumno obedece; los programas de estudio y las condiciones están impuestos etc…
En la educación popular hay técnicas de acercamiento para establecer vínculos entre los participantes y, como dice Sebas Parra, se enamora el que enseña y el que aprende.
Porque la educación también es amor.

¿Cómo ser eficazmente revolucionarios? se pregunta otro filósofo, Fernando Savater, en su libro El valor de elegir. ¿Por dónde empezar la revolución difícil pero necesaria? Yo elegiría comenzar por la educación”.
Y esto es válido para el norte que tanto tiene que aprender del sur.
Es necesario inculcar hoy en los ciudadanos de mañana valores cívicos. Formar en ellos personalidades con recursos psicológicos y éticos, que sepan resolver problemas privados, familiares y sociales… Gente educada, cívica, que no se mire con mala leche si alguien le pisa en el metro o se líen a bofetadas en un semáforo.


Después de lo de Anay, esta la segunda vez en muy poco tiempo que tengo oportunidad, casualmente, de conocer a alguien que admiro, a ver si mañana me encuentro con Galeano tomando el café en el Bar Bonito…

1 comentario:

  1. Me sigue alucinando que tan chiquininis ya tuviera ese flequillo eléctrico que me vuelve loco...

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